Con el corto  KONY 2012 Invisible Children, la  ONG con base en San Diego California, apunta a hacer a Joseph Kony famoso, no para celebrarlo, sino para sentar un precedente en la justicia internacional.

El viral  busca darle notoriedad mundial al rebelde Ugandés y logra llamar la atención de las personas que tienen el poder para detenerlo.

Con tres semanas al aire el video ha logrado 17 millones de views en Vimeo y 76 millones de views en Youtube,  convirtiéndose en el video más viral de la historia.

Más allá de las críticas que se han generado alrededor de la campaña, de la cual los invito a sacar sus propias conclusiones, la estrategia usada está probando el poder de difusión que tienen las redes cuando se  conecta al público con una causa común.

Otro ejemplo de este tipo de estrategias es Avaaz, una comunidad global de movilización online que integra la acción política impulsada por la ciudadanía dentro de los procesos de toma de decisiones globales.

El cyber-activismo parece una forma floja de apoyar una causa, pero vale la pena reflexionar; internet es un canal de comunicación, y detrás de esa comunicación existe una persona de carne y hueso que está realizando una acción con un objetivo a partir de una experiencia creada, en este caso, por un video de 30 minutos y aunque esa persona puede no hacer una diferencia ¿Qué tal 93 millones de personas?

Tomen media hora de su tiempo y déjense llevar por este fenómeno mundial.